Echemos un vistazo al estrés desde una perspectiva ligeramente diferente, alejándonos de la psicología y no achacando la culpa a los tiempos en que vivimos. Es importante ser práctico y realista cuando revisamos sus causas. Empecemos.
El estrés es nuestro sistema de defensa natural
La gente nace con una respuesta instintiva al estrés. Cuando surge una situación potencialmente peligrosa, se liberan las hormonas del estrés en el torrente sanguíneo.
¿Qué sucede entonces? Estas hormonas inducen reacciones físicas y mentales: nos sentimos asustados, pero al mismo tiempo estamos llenos de energía y dispuestos a luchar.
No obstante…
…hoy, en lugar de usar las hormonas del estrés solo en situaciones de urgencia, las activamos en todo momento: cuando llegamos tarde, preocupados por no cumplir un plazo o incluso cuando tenemos un problema con el teléfono móvil.
Debido a esto, estamos «llenos de energía y dispuestos a luchar» con demasiada frecuencia y nuestros cuerpos no tienen tiempo suficiente de relajarse y calmarse.
¿El efecto? Bueno, aparte de «estar estresados», también estamos agresivos, temperamentales, histéricos y con frecuencia de mal humor. Somos todos nosotros una bomba de relojería con un rostro humano.
¿Te suena familiar?
Lo que podemos hacer
En primer lugar, identifiquemos las situaciones que nos llevan a este estado instintivo de «lucha o huida».
Desde luego, normalmente sucede cuando tenemos que salir de nuestra zona de confort o cuando tratamos con depredadores poderosos(normalmente personas agresivas, intimidantes o más poderosas). Cierto, no hay mucho que podamos hacer al respecto.
Pero, ¿qué pasa con otras situaciones estresantes? ¿No crees que a menudo nos estresamos cuando sabemos que estamos haciendo algo que no es correcto? Y no se trata de robar ni de lastimar a nadie. A menudo, se trata de no cumplir nuestras expectativas, ya sean ajenas o propias.
Situación 1
Podrías sentirte estresado cuando realizas un trabajo de baja calidad. Todos, incluso tu jefe y tú, sabéis que podías hacerlo mejor…
Ejemplo John está realmente estresado por su presentación. Pero… ¿empezó a prepararla con suficiente antelación? ¿Hizo una investigación a fondo? ¿Utilizó imágenes de buena calidad? ¿Se aprendió las funciones de software que utilizará durante la presentación? ¿Se leyó la presentación dos veces para eliminar todos los errores y ensayar? Seamos honestos: si no lo ha hecho, las probabilidades son que estaría demasiado estresado.
Solución: Cuando haces algo, simplemente das lo mejor de ti. Céntrate en el aquí y ahora. Elimina distracciones, prepárate, lee documentación extra sobre el tema y ten preparado material de consulta. Si encuentras dificultades, solicita ayuda a algún experto en ese campo. Sé serio con tu trabajo.
Situación 2
Con razón, podrías sentirte estresado cuando supones que hay gente que te juzga y critica.
Ejemplo Amanda trabaja en un departamento de marketing y tiene prisa por llegar a la reunión con su equipo. Acaba de enviar un boletín informativo a 10 000 clientes. Está estresada puesto que sabe que no se ha centrado lo suficiente mientras preparaba, editaba y daba formato al mensaje. Sus compañeros siempre leen y comentan los boletines de la empresa. Tal vez encuentren un error y sus críticas estarían completamente justificadas.
Solución: Esto está relacionado con el punto anterior. Si hiciste el trabajo rápido y descuidado te encuentras en una posición poco correcta. Si estás seguro de que hiciste todo lo posible y empleaste todos tus conocimientos y energía entonces no deberías preocuparte. Simplemente tienes que estar abierto a los comentarios.
Para evitar situaciones de estrés, sé honesto contigo mismo. Trata de aceptar solo tareas que puedes hacer, es decir, asegúrate de que cuentas con los conocimientos especializados y el tiempo suficientes para realizar el trabajo. Si te sientes abrumado por el trabajo y no tienes tiempo, admítelo e informa a tu superior. Una vez que empiezas una tarea, tienes que estar seguro de que harás todo lo posible, estarás muy centrado y tendrás el material de referencia y el tiempo suficiente. Si las tareas que te encargan te parecen demasiado difíciles, puede que sea el momento de hablar con tu jefe o de volver a valorar tu itinerario profesional.
Situación 3
Te sientes estresado cuando dices o haces cosas que pueden lastimar a los demás, molestarles o irritarles.
Ejemplo Andrew vive con sus padres. Se comprometió a pagar las facturas de la compañía eléctrica cada mes. Tiene problemas financieros y no ha pagado dos facturas seguidas. Ahora, tiene que decírselo a sus padres y esto le estresa. ¿Estaría menos estresado si hubiese gastado menos dinero en las ofertas del Black Friday o hubiese pagado la factura del mes pasado en lugar de ir de viaje con sus amigos?
Solución: Respeta a los demás, aprende a admitir tus errores y una vez más, hagas lo que hagas, hazlo lo mejor posible. Todas las relaciones deben basarse en la sinceridad y en la implicación máxima de las «partes». Para evitar conflictos y situaciones difíciles, sé razonable, céntrate y prevé los resultados futuros. Si haces una promesa o te comprometes con una responsabilidad, intenta eliminar todos los obstáculos posibles.
Otras situaciones que debes tener en cuenta
Jenny va a llegar tarde al trabajo. De nuevo, seamos sinceros: quizás si se hubiese levantado más pronto no llegaría tarde. Si se hubiese preparado la ropa por la noche, no habría perdido 10 minutos decidiendo qué ponerse hoy, etc.
George está en una reunión con su equipo. Su jefe parece estar decepcionado, puesto que George no está participando mucho en el debate. George podría compartir una opinión significativa sobre el tema del debate y sugerir una solución interesante, pero no lo hará. ¿Por qué? ¿Está centrado? ¿Está allí o está pensando en otra cosa o mirando Facebook en el teléfono?
Blake está estresado, puesto que está teniendo problemas para pagar sus facturas. Pero, ¿administra su presupuesto y lo revisa periódicamente? ¿Anota los gastos más importantes y planifica racionalmente sus gastos? Si lo hiciese, probablemente podría pagar la mayoría de sus facturas.
No se trata de ser perfecto
Ninguno de nosotros es omnipotente, pero podrían disminuir radicalmente nuestros niveles de estrés si nos aseguramos de centrarnos en el presente, somos sensatos y simplemente hacemos las cosas lo mejor posible.
Autora: Magda del equipo de marketing de Nozbe
