Puedes tener las mejores intenciones del mundo, pero no llegarás muy lejos si tu entorno trabaja en contra de esas intenciones. La productividad requiere un entorno que permita a las personas cumplir objetivos. Hacer algunas pequeñas modificaciones en tu entorno de trabajo puede hacer que todos avancen con el máximo impulso.
1. Utiliza la psicología del color
Los tonos blanco, gris y beige claro no son muy inspiradores. Nos recuerdan las salas de espera de los hospitales y otros entornos estériles que no invitan a la creatividad. Una capa de pintura puede hacer que tu oficina ofrezca una sensación un poco más cálida y brillante. Muchas compañías usan el color azul para fomentar la productividad, mientras que otras se decantan por la energía vibrante que propician los tonos amarillos o verdes.
2. Haz que las cosas sean libres y abiertas
Nadie es una isla. Todo el mundo necesita comunicación y fácil acceso a los miembros del equipo para crear un proyecto correctamente. Si todo el mundo está aislado y bloqueado, el flujo de la conversación se vuelve mucho más difícil. Establece algunas áreas de trabajo espaciosas para que la gente pueda realizar aportaciones masivas de ideas y puedan cumplir objetivos juntos. El trabajo en equipo hace realidad los sueños. Asegúrate de que las personas también tengan un espacio tranquilo donde puedan concentrarse y cambiar a modo de trabajo profundo.
3. Deshazte del desorden
Cuando hay un montón de cosas innecesarias por todas partes, se tarda mucho con la limpieza. Los espacios de trabajo parecen más pequeños y es más difícil hacer las cosas. Tira o dona las cosas que no uses. Busca una unidad de almacenamiento de documentos y equipamiento que necesitarás guardar, pero no es necesario guardarlo en la oficina.
4. Anima a la gente a que se aleje de sus teléfonos
Todos deben estar en la misma página en el lugar de trabajo. La productividad proviene de la unidad y la optimización. Todos saben qué están haciendo los demás y es evidente en qué fase de un proyecto has entrado. Aquí es donde entran en juego aplicaciones de productividad como Nozbe. Si todos están conectados de manera organizada, nada es imposible.
5. No más comida basura
Deshacerse de la comida basura hará que todos sean más productivos. Los refrescos azucarados y los carbohidratos vacíos y salados entre comidas bajarán los niveles de energía de todos. Puede que tenga un buen sabor, pero no proporcionan ninguna energía real que pueda utilizar la gente en el lugar de trabajo. Cambia la comida basura por mejores tentempiés Sustituye la soda por agua con gas. Deshazte de las patatas fritas en favor de la fruta fresca, los frutos secos e incluso el queso. La comida saludable es un combustible saludable y eso es exactamente lo que todos necesitamos para mantenernos con energía todo el día.
6. Más tiempo para moverse
Sentarse quieto mirando una pantalla fijamente todo el día puede aplastar la productividad. La gente necesita alejarse de lo que está haciendo, hacer que la sangre fluya y regresar con ojos frescos y un movimiento elevado. Tómate un tiempo del día para levantarte y caminar. En lugar de ir a la sala de descanso a tomar una taza de café, camina hasta la cafetería local. Un poco de aire fresco y un breve cambio de escenario hace que sea más fácil regresar con un mejor enfoque, por no mencionar el pequeño aumento de endorfinas de la actividad física.
7. Priorizar la salud y el bienestar
La enfermedad es el mayor asesino de la productividad. Las personas sobrecargadas de trabajo que no hacen mucho ejercicio y están atrapadas en una habitación juntas todo el día son propensas a propagar gérmenes. Esta es exactamente la razón por la que los programas de bienestar son tan importantes: animan a los empleados a tener una buena salud. Coloca unos cuantos purificadores de aire por la oficina y asegúrate de que las superficies se desinfectan todos los días. Si quieres ir más allá, deja una fuente grande con cítricos, porque su alto contenido de vitamina C ayuda a estimular el sistema inmunológico.
Cada uno prefiere trabajar de manera diferente. Pregunta a la gente de la oficina qué cambios se pueden hacer para ayudarles a ser más productivos. Te sorprendería lo que algunas personas sugieren.